INFORME| ¿Aumentó o bajo el ausentismo laboral en tiempos de «Home Office»?
La pasada semana uno de los temas que más repercusiones tuvo, fue el curioso hecho del que fue protagonista el Diputado Esteban Bullrich, de Juntos por el Cambio, cuando colocó una imagen suya para simular estar presente mientras sus pares debatían modificaciones al Proyecto de ley de Reforma Judicial y evitar ser visto, en el marco del plenario de Comisiones de Asuntos Constitucionales y Justicia y Asuntos Penales.
Excusa mediante, lo cierto es que la noticia fue viral en pocos minutos y miles de “memes”, cargadas y desazón inundaron por doquier las redes.
Es que en esta Pandemia algo que llegó para quedarse podemos decir es el “Teletrabajo”, al punto que el mismo Congreso tuvo en cuenta para dictar una Ley que regula los detalles de la nueva relación laboral a distancia.
Con ella también llegaron las nuevas “excusas” para ausentarse. En tiempos donde no es tan fácil decir “tengo gripe, diarrea o algo de fiebre” ya que desataría la activación de un protocolo, justo y necesario, con el envió de un médico al hogar con total seguridad. Nadie en sus cabales jugaría a “mentir” falseando los “viejos” síntomas que otrora permitía una ausencia al puesto del trabajo.
En #CincoDias repasamos un reciente informe de Adecco Argentina, que da cuenta de cómo está la estadística de “ausencia laboral” en los últimos meses.
Según datos realizado por la filial de la empresa líder en el mundo en consultoría integral en Recursos Humanos, hacia fines del año 2019, las principales causas de ausentismo de todos los eran “los problemas de salud” (55,78%) y los “trámites personales y/o visitas médicas” (48,21%). Luego, y en menor medida, están los motivos relacionados a los hijos (13,1%), los problemas personales (11,63%), la desmotivación (7,22%), los problemas con el transporte (2,95%) y, por último, los motivos gremiales (0,7%).
Sin embargo, el nuevo período de cuarentena, con el cambió para muchos de la modalidad de trabajo implicó que, además de trabajar desde sus hogares, muchos de los empleados tuvieron que: ayudar a los chicos con sus clases y tareas, ocuparse de la desinfección del hogar, convivir 24 horas en familia, hacer la comida y otras tantas tareas que se incorporaron a la rutina diaria que, ahora, se intercalan con la jornada laboral. “Todas estas situaciones llevaron a que no siempre todos puedan participar en los horarios que se establecen para las famosas reuniones y actividades virtuales”, indica el informe.
Cámaras apagadas, micrófonos desconectados, preguntas que se le hacen a determinada persona a las cuales le sigue un profundo silencio porque no hay nadie del otro lado, desconexiones imprevistas a veces por fallos en la conectividad y otras no tanto, y así un sinfín de situaciones que describen la nueva forma de “ausentismo laboral virtual” en tiempos de home office forzado. Algo muy al estilo Bullrich podemos decir.
“El ausentismo virtual es una nueva modalidad que apareció con la cuarentena y que explica de alguna manera las situaciones por las cuales atraviesa en este momento el trabajador argentino que está realizando home office”, explica Alexandra Manera, Directora de Recursos Humanos del Grupo Adecco Argentina & Uruguay. “Pasada la novedad es importante tener en cuenta que no es tan sencillo coordinar una reunión y que todos puedan participar y estar atentos al momento de realizarse, ya que no están en su lugar de trabajo y en los hogares existen un montón de situaciones mientras se realiza dicho encuentro de trabajo”, completó la ejecutiva.
Por tal motivo, Adecco Argentina elaboró un listado de puntos a tener en cuenta a la hora de diseñar una reunión virtual, a fin de evitar el ausentismo:
-Flexibilidad a la hora de pautar una reunión: no todos tendrán la misma disponibilidad por más que la reunión suceda durante la llamada jornada laboral. Ser flexible y estar dispuestos a cambios de horarios para que todos puedan sumarse.
-Duración: una reunión corta puede ser muy efectiva (se recomienda hacerla de 30 minutos) y evitar así las “ausencias repentinas” y las cámaras apagadas.
-Periodicidad de las reuniones: es importante también balancear la cantidad de reuniones para no cansar a los empleados y transformar un hecho que intenta ser positivo en todo lo contrario. Quizás una reunión por semana puede ser efectiva si además se mantiene una comunicación diaria de seguimiento de actividades. Si no hay nada nuevo para comunicar, la reunión bien puede ser suspendida para la semana siguiente.
-Pirámide invertida: ir de lo más importante a lo menos trascendente; así aquellos que por alguna circunstancia necesiten ausentarse de la reunión ya tendrán a mano la información más importante.
-Anticipación de la información: ahora que todo es virtual, la información también puede compartirse antes del encuentro de manera de agilizarlo y que todos sus participantes cuenten con el material necesario para abordar los temas más relevantes.
-Dinámica: como la reunión es virtual tiene que intentar ser lo más práctica posible teniendo en cuenta que la situación es diferente para cada persona.