Día de la Memoria: ¿Cómo espiaba la ex Side a organismos de Derechos Humanos en la dictadura?
Se trata de documentación desclasificada y recuperada de los archivos de la ex secretaría de Inteligencia (SIDE), que llegó a la sede de Abuelas almacenada en dos cajas, y abarca el período entre 1977 y el 30 de diciembre de 1988.
Entre los archivos hay microfichas que dan cuenta de tareas de espionaje a los familiares de desaparecidos durante la dictadura a través un seguimiento de las actividades de denuncia y búsqueda. Los archivos surgen de lo hallado en las bases informáticas de consulta de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en el 2020.
«En términos generales, el material demuestra el interés de los servicios de inteligencia en las dinámicas de trabajo y organización de Abuelas en todos los niveles», aseguró la organización, a 45 años del inicio del golpe cívico-militar.
Un ejemplo sobre el accionar de la ex SIDE para investigar la actividad de Abuelas de Plaza de Mayo es que el régimen militar tenía un registro de las donaciones que recibían de distintas partes del mundo, así como los contactos internacionales y un listado completo de las integrantes del organismo, incluyendo las filiales del interior del país.
También se encontraron fichas con llamativas descripciones de las capacidades y vulnerabilidades de la Asociación, de acuerdo al punto de vista de quienes elaboraron esos materiales.
«En el archivo institucional de Abuelas se conserva el discurso que Abuelas brindó en Naciones Unidas por esos días y la repercusión en los medios nacionales e internacionales que provocó», indicó la organización.
Espionaje al CELS
Los archivos desclasificados incluyen fichas sobre el CELS que daban cuenta de «la fundación del organismo en 1979, su constitución legal y sus primeras acciones públicas de denuncia y formación de redes de solidaridad a nivel local e internacional».
Por otra parte, la ex SIDE realizaba un seguimiento de las denuncias de desapariciones del CELS, incluyendo «la reproducción de comunicaciones internas, así como sobre comunicados, reuniones y decisiones tomadas en el trabajo jurídico de los casos».
Un tercer punto en que se agrupa la información refiere a los seguimientos particulares a integrantes del CELS y de su participación en distintos ámbitos», detalló Abuelas en el escrito.
«Creemos que la difusión de estos documentos debe ser muy cuidadosa, tanto para que sean comprendidos en su contexto de producción en el marco de agencias de inteligencia, como por las menciones sensibles que pueden contener respecto de víctimas y familiares, y porque también pueden tener valor como evidencia judicial«, agregó la agrupación de Derechos Humanos.
Fuente Bae Negocios