La mentira del «Cohete fuera de control Chino»

En principio es necesario saber que no hay ningún cohete “fuera de control” poniendo en riesgo la  vida en la tierra o la destrucción de alguna ciudad, si bien es cierto que en las próximas horas se espera el reingreso de una gran pieza de basura espacial, los medios de comunicación se han encargado de exagerar este asunto hasta los extremos, así que en #CincoDías aclararemos algunos puntos.

El cohete Larga Marcha 5B que lanzó al Tianhe en la rampa de lanzamiento

El pasado 29 de abril a las 04:23 am UT, despegó un cohete Larga Marcha 5B desde el centro de lanzamiento de Wenchang, en China, a bordo viajaba el módulo Tianhe, pieza central de la nueva estación espacial china de 60 toneladas que continuará construyéndose durante los próximos dos años, los cuatro aceleradores laterales y las dos mitades de la cofia reingresaron en el océano Pacífico a los pocos minutos del lanzamiento, pero el núcleo del cohete que impulsó al Tianhe al espacio también terminó alcanzado la órbita, esto es muy común en las etapas superiores de cohetes, mismas que suelen ser desorbitadas a las pocas horas de haber concluido su misión, pero este no fue el caso de este lanzamiento.

Diagrama del módulo Tianhe

Ambos, el módulo Tianhe y la etapa superior del cohete entraron en una órbita elíptica preliminar de aproximadamente 170 x 380 km de altitud (sobre el nivel medio del mar), mientras que la estación espacial utilizó sus sistemas de propulsión autónomos para alcanzar una órbita de trabajo de 350 x 380 km, la etapa superior del cohete se lo dejó en la misma órbita sin mayores maniobras propulsivas para que reingresase de manera natural un par de semanas más tarde, ¿esto significa que China ha dejado este cohete abandonado apara que caiga en cualquier lugar del planeta? Si, pero en realidad no es para tanto.

Imagen simulada de la pieza que entrará a la atmosfera terrestre. Algo similar sucedió en 2020 sin mayores consecuencias

Resulta que prácticamente todos los lanzamientos a la órbita terrestre dejan alguna clase de basura espacial, la mayoría reingresan a la Tierra pocas horas o días tras el lanzamiento, mientras que algunos países o empresas buscan desorbitar las etapas superiores para evitar que choquen con algún satélite operativo, aunque esto no es para nada obligatorio para las potencias especiales, es más bien un gesto de cortesía que puede elevar el costo del lanzamiento algunos millones de dólares por el combustible y masa extra que se debe lanzar, por lo que es normal que a veces se opte por no desorbitar las etapas y dejar que la resistencia atmosférica haga su trabajo unos días después.

¿Entonces una etapa de un cohete del tamaño de un edificio puede caer sobre mi cabeza? En realidad no, pues, cuando este enorme tanque de combustible ingrese a la atmósfera terrestre, la temperatura exterior que generará la interacción entre el cohete y la atmósfera mientras el primero viaja a alrededor de 28000 kilómetros por hora fragmentará la estructura en miles de pequeños trozos, la mayoría de los cuales se vaporizarán a decenas de kilómetros de altura, es posible que algunos fragmentos muy resistentes hechos con fibra de carbono o titanio sobrevivan al reingreso y que logren llegar a la superficie, pero caerán a velocidad terminal.

Mapa de probabilidades de impacto. Los expertos aseguran que será debajo de las líneas azules

Además de lo anterior, la probabilidad de que alguno de estos trozos sobrevivientes caiga en una zona poblada es relativamente escasa, es mucho más probable que el ingreso ocurra sobre el océano y nadie siquiera se entere del mismo, aunque como ya se mencionó antes, tanto la masa como la velocidad de los fragmentos que lleguen a la Tierra serán relativamente pequeños y es prácticamente imposible que puedan lastimar a alguien, aunque siempre puede haber alguien con muchísima mala suerte suelto por ahí…

Así que a no preocuparse por cohetes que caen del cielo, es bastante poco probable que caiga en algún sitio remotamente poblado y mucho menos que caiga sobre alguien, recuerde que estos reingresos son relativamente comunes y jamás han lastimado a alguien.