Accidente aéreo en Turquía: el avión salió rodando de la pista
Tres muertos, decenas de heridos entre los que se incluyen la mayoría de pasajeros y toda la tripulación fue el balance de un accidente aéreo en Turquía. Durante el aterrizaje, el avión derrapó y finalmente se partió en tres pedazos.
La aeronave, en el que viajaban 177 pasajeros y seis tripulantes, cubría la ruta entre Esmirna, la tercera ciudad de Turquía, y Estambul. La mayoría de las personas a bordo eran turcos pero también había 22 extranjeros de 12 nacionalidades diferentes.
Aunque se desconocen las causas exactas del siniestro, el Ministerio de Transporte alegó que se debió a que hizo “un aterrizaje duro”. En las conversaciones de la torre de control publicadas por los medios turcos se escucha a un controlador decir “está avanzando muy rápidamente (…) envíen a las ambulancias y a todos los equipos”. De acuerdo con los datos de la web especializada Flighradar24, el avión aún marchaba a 70 nudos (130 kilómetros por hora) cuando salió de la pista de aterrizaje.
Otras causas que podrían haber contribuido al accidente según los medios turcos podrían haber sido el fuerte viento de cola y la fuerte lluvia caída en las últimas horas. Un general del aire retirado consultado por CNN-Türk, aventuró la posibilidad de que los charcos de agua formados en la pista podrían haber provocado que el aparato patinase.
Un testigo presencial citado por la misma cadena aseguró haber visto al aparato sacudirse de izquierda a derecha por el viento antes de tomar tierra.
Ante los medios, el gobernador de Estambul, atribuyó las causas del accidente a las malas condiciones meteorológicas y aseguró que podría haber sido mucho peor de no haber intervenido rápidamente los servicios de emergencia para evitar que el aparato se incendiase.
Imágenes publicadas en medios turcos mostraron el fuselaje del avión fracturado y en algunos vídeos se percibía cómo los pasajeros eran evacuados del avión, situado en una zona cercana a la autovía que pasa junto al aeropuerto. Algunos viajeros pudieron salir de la aeronave por su propio pie a través las alas del aparato. Las autoridades turcas no han especificado si las víctimas mortales fallecieron en el momento del impacto o ya en el hospital, pero Anadolu, la agencia de noticias oficial turca, publica que al menos uno de los cadáveres fue extraido de entre los restos del fuselaje horas después del accidente.
Este no fue el primer incidente de este tipo que afecta a la compañía turca. El pasado 7 de enero, un aparato igual, procedente de la ciudad emiratí de Sharjah, se salió de la pista del Sabiha Gökçen y sus pasajeros hubieron de salir a través del «slide» (tobogán hinchable para casos de emergencia). El tráfico aéreo hubo de ser suspendido durante seis horas lo que provocó una gran congestión en el aeropuerto. Hace dos años, otro Boeing 737-800 de Pegasus, se salió de la pista del aeropuerto de Trabzon (norte de Turquía) durante un aterrizaje con malas condiciones meteorológicas. El aparato se despeñó por un terroso acantilado y quedó embarrancado a pocos metros del mar.