El Gobierno quitó los subsidios a las empresas del interior y liberó los aumentos del boleto
El Gobierno Nacional quitó los subsidios a las empresas de transporte del interior del país lo que generó malestar en las provincias. Luego de la vuelta a comisiones de la Ley Ómnibus algunos gobernadores lo tomaron como una «revancha» por no haberla votado.
Mediante un comunicado en el Boletín Oficial el Palacio de Hacienda informó la supresión del Fondo Compensador del Interior, cuyas sumas eran recibidas por empresas prestatarias de los servicios en las distintas jurisdicciones.
Los empresarios de transporte cuestionaron la eliminación de subsidios al interior del país
No obstante, el oficialismo aclaró que los usuarios que «necesiten del aporte del Estado Nacional, seguirán contando con el tributo social a través de la tarjeta SUBE», que implica un descuento del 55% de la tarifa. Se trata, en suma, de aquellas personas que hayan tramitado la tarifa social.
Esta medida implica la desregulación del sector y da vía libre a las compañías para que puedan llevar el boleto al precio que consideren necesario.
Para algunos gobernadores se leyó como una «venganza» para otros, mas oficialistas, refieren que esto estaba en los planes del presidente Javier Milei.
De momento, malestar, preocupación e incertidumbre son los denominadores comunes entre las jurisdicciones, independientemente de sus escuderías políticas.
El dato político es que el anuncio impactará de lleno en dos provincias a cuyos mandatarios Javier Milei acusó directamente por su naufragio en el Congreso: Santa Fe y Córdoba, gobernadas por el radical Maximiliano Pullaro y por el peronista no K Martín Llaryora. Ninguna de ambas cuenta con el sistema SUBE.
La tensión es tal que hasta el mendocino Alfredo Cornejo, de vínculo aceptable con el oficialismo, se manifestó en contra.
«La eliminación de subsidios de transporte para el interior del país, sosteniendo los del AMBA, incumple el Pacto Fiscal de 2017. Se mantienen fuertes asimetrías entre el conurbano bonaerense y el resto del país. Bienvenido el orden fiscal, pero debe ser equitativo», dijo en X.
Similares palabras tuvo su compañero de la liga de Juntos por el Cambio (JxC), el santafesino Maximiliano Pullaro, quien denunció: «Otra vez nos dejan solos».
«Otra vez nos dejan solos», denunció el santafesino Maximiliano Pullaro.
“Nosotros vamos a mantener el subsidio que tiene la provincia de Santa Fe con el transporte, que es alrededor de 2.000 millones, y lo vamos a actualizar, porque claramente los costos de vida han aumentado en toda la provincia, pero no nos podemos hacer cargo de lo que Nación no manda, con una provincia que nos la han dejado con un déficit muy pero muy grande”, apuntó.
Acto seguido, Pullaro remarcó que “lo que sí no vamos a permitir es que vengan avasallar o a meterse con el sistema productivo de la provincia de Santa Fe». «No le vamos a permitir a ningún gobierno nacional que venga por más retenciones al campo y a la industria, porque eso atenta contra la generación de empleo y contra el crecimiento económico de muchas regiones de la República Argentina, pero principalmente de mi provincia de la provincia de Santa Fe”, disparó,
Ante la consulta de Ámbito, una fuente amarilla reveló que «había un acuerdo con el gobierno que incumplió. Les dijo a los gobernadores que en enero lo financien ellos el subsidio y a partir de febrero los recursos los ponía Nación».
Desde despachos bonaerenses, compararon la situación con lo que ocurre con el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), cuyas transferencias a las jurisdicciones fueron de apenas $12 millones en enero, tal como contó este medio.
El llamado de conciliación obligatoria emitido por la Secretaría de Trabajo evitó un paro de colectivos en el interior del país.
«Cae como todo lo que hace el Gobierno, que dijo que iba a terminar con casta y lo único que hacen es perjudicar la vida de los laburantes; clase media y baja, que son los que verdaderamente afectan por el uso y necesitan de los medios de transporte públicos», señalaron desde La Plata al conocer la noticia.
Más tarde fue el propio ministro de Transporte bonaerense, Jorge D’onofrio, quien sentó posición oficial. «Esto es una venganza por la caída de la ley ómnibus», denunció el funcionario massista. A la vez consideró que «no es un ajuste a los gobernadores sino a la gente».
La administración peronista de una provincia del norte comentó que harán el esfuerzo por sostener el boleto pero que en el mediano plazo deberán ajustar la tarifa nuevamente.
En la región patagónica, en tanto, analizaron que «el efecto que va a tener en la gente es lamentable». «La quita de subsidios va a afectar al usuario del transporte, que precisamente no es la gente que más recursos tiene, es la gente que tiene que ir a trabajar», remarcaron.
En esa sintonía, una fuente manifestó que en el interior «vamos a sufrirlo mucho menos que en CABA, que en Rosario o Mendoza, porque acá las distancias son más chicas. La gente tendrá que ajustarse y ver».
A la vez, especificaron que el ajuste siempre formó parte del plan de Javier Milei. «Lo dijimos en su momento y nos acusaron de ‘sembrar terrorismo’. Las pruebas nos demostraron que teníamos razón: el ajuste no es sobre la casta, salvo que la casta sean los laburantes», protestó una fuente peronista.
«Esta medida no es contra los intendentes, es contra los millones de estudiantes, enfermeros, trabajadores que diariamente utilizan el transporte público para movilizarse en sus respectivas ciudades. Una determinación semejante afecta de forma directa a la productividad del país», dice el escrito.
A la vez, remarca que de confirmarse a través de una resolución lo expresado ante la prensa, «esta medida implicaría dejar sin transporte a todo el interior del país». «Vale remarcar además, que se sostiene la inequidad con el AMBA, ya que la eliminación solo está planteada para el interior», protestaron.