El plan del Gobierno para la deuda no es sustentable
El último informe del Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano analiza los números del plan de sustentabilidad de la deuda que presentó el ministro Martín Guzmán a los acreedores externos.
“La deuda actual requeriría de un financiamiento de unos 300.000 millones de dólares entre 2020 y 2023, un guarismo claramente inalcanzable en las actuales circunstancias. El pago de intereses significó ya en 2019 un 18,4% de los ingresos del gobierno central, siendo que entre 2003 y 2016 se había mantenido por debajo del 10%”, subraya Víctor Beker, director del CENE en el reporte.
“El gobierno considera que no es posible plantearse un objetivo de resultado primario superior al 1,2% del PBI y una tasa de crecimiento anual superior al 2% anual. Las proyecciones suponen un superávit fiscal a partir de 2021, lo cual habilitaría el inicio de pagos de la deuda a partir de dicho año”, continúa el economista.
“Sin embargo, dichas proyecciones fueron realizadas antes del estallido de la pandemia del COVID-19. Sus consecuencias en lo inmediato, con la caída de los ingresos fiscales y el aumento del gasto público, obligan a rever lo previsto para 2021”, señala.
“El total de la deuda en manos de acreedores privados es de 83.000 millones de dólares, que es lo que está sujeto a renegociación con vistas a alcanzar una propuesta compatible con aquellas proyecciones. En cuanto a la deuda intra-sector público, que totaliza 130.000 millones de dólares, se prevé su total refinanciación, de modo que el BCRA, la ANSES y el BNA no podrán disponer de dichas acreencias. Finalmente, la deuda con el FMI y otros organismos internacionales, por cerca de 75.000 millones de dólares, sería el objeto de otra renegociación, una vez concluido el acuerdo con los acreedores privados”, augura el director del Centro de Estudios de la Nueva Economía de la Universidad de Belgrano.