Tevez y Riquelme: un juego de desgaste con final incierto en Boca
La propuesta que Boca Juniors le hizo a Carlos Tevez para renovar el contrato por un año y con una mejora en sus ingresos respecto de la primera oferta, dejó la decisión del lado del futbolista, en un contexto de desgaste entre los dos últimos ídolos del «xeneize», ya que por el club el que lleva adelante la negociación es Juan Román Riquelme.
Cuando parecía que anoche se fumaba la pipa de la paz y Tevez finalmente arreglaría su contrato con Boca, el pedido de una cláusula para extenderlo de un año a 18 meses por parte de la secretaría de fútbol que conduce Riquelme, volvió a trabar todo al punto de que por ahora no se aprecie la luz en el final del túnel.
Cuando «Carlitos» le confirmo vía celular al presidente Jorge Ameal que estaba de acuerdo con el contrato de un año de extensión, con un artículo que decía que a los seis meses si el jugador quería se podía rescindir, no esperaba que su representante Adrian Ruocco le informara que vía email había llegado otro contrato igual al anterior, pero con un agregado.
Se trata de una cláusula de extensión por seis meses hasta el 31 de diciembre de 2021, ya que según la AFA a partir de ahora los contratos tendrían que ser de enero a diciembre. Por lo tanto, para ajustarse a eso habría que firmar por seis meses o por 18, pero con alguna salida legal también se podía rubricar hasta junio del año próximo.
Ese ítem tiró para atrás la postura de Tevez y su entorno, al punto de poner otra vez en duda la continuidad del ídolo en Boca y ahora también sus ganas de seguir en el fútbol profesional.
«A Carlos lo están desgastando», señaló alguien importante del círculo íntimo del futbolista a Télam. Y de ahí las palabras del delantero cuando le preguntó anoche al presidente Jorge Ameal si él y Riquelme querían que siga en el club.
La respuesta afirmativa del directivo boquense, quien hasta ahora no habló en forma pública sobre el tema y deja actuar a los encargados del consejo de fútbol del club de la Ribera.
Del otro lado tienen otra mirada: «De entrada nos pidió 18 meses y ahora que le damos la posibilidad del año y medio no lo quiere. Quiere un año solo. De esta forma nos ajustamos a lo que pide AFA y no tenemos que sentarnos a negociar en el medio de la competencia. Además, a mediados de 2021 podría decir que no sigue», comentan en cercanías de Román.
A su manera, ambos tratan de debilitar la posición del otro lado sin darse cuenta que están caminando arriba de una cuerda muy floja, donde en caso de no llegar a un acuerdo ambas partes perderían.
«El jugador del pueblo» vería frustrado su anhelo de poder jugar e intentar ganar la Copa Libertadores, pero Riquelme podría cargar sobre sus espaldas, resultados mediante, el haber hecho con el último ídolo del club algo que nunca le perdonó a Daniel Angelici, cuando se lo hizo a Román: poder retirarse en el club que quieren y del cual son hinchas.
Más allá que se diga de ambos lados que esto ya no es por dinero, esto tuvo su comienzo cuando Boca le ofreció a Tevez un año de contrato por una cifra un 30 por ciento inferior a lo que ganaba en la gestión de Angelici como presidente.
El ex Juventus y Manchester City respondió con un monto salarial muy parecido a lo que cobraba en su retorno de China, muy difícil de pagar en el marco de la pandemia por la Covid-19 con el fútbol suspendido, sin fecha de regreso y con los clubes en un ajuste de sus gastos y los sueldos de sus jugadores.
Después de declaraciones a los medios y los twitts de Jorge Bermúdez, uno de los integrantes de la secretaría de fútbol que encabeza Riquelme, la situación derivó en una lucha para ver quien tiene más poder. Y ahora la puja es por quién puede desgastar más al otro.
Carlos Tevez, de 36 años, concluyó ayer su vinculo con Boca, club al que regresó desde China en enero de 2018. Y fue una figura clave para la obtención del título de la Superliga, en la última fecha, al convertir el gol del campeonato ante Gimnasia en la victoria por 1 a 0, el 7 de marzo pasado.
En su exitosa carrera en Boca, Tevez consiguió 10 títulos, entre ellos una Copa Libertadores y una Intercontinental, y es el jugador argentino con más campeonatos y copas ganadas después de Lionel Messi.