El Gobierno expresó su protesta por ejercicios militares británicos en las Islas Malvinas
El Gobierno expresó su protesta por los ejercicios militares británicos que se realizaron en las Islas Malvinas y reiteró el pedido al Reino Unido para «retomar las negociaciones diplomáticas por la soberanía» del archipiélago.
La Cancillería consignó que durante este mes se llevaron adelante ejercicios militares en las islas con el «buque patrullero HMS Forth, la Compañía de infantería británica A y la aeronave A400M, junto a los Typhoons de la 1435 Flight de la RAF», que «forman parte del despliegue de ocupación ilegal del Reino Unido».
El secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Daniel Filmus, aseguró que esa actividad «viola todas las recomendaciones aprobadas por las Naciones Unidas y por los acuerdos de los países con costas en el Atlántico Sur».
«Argentina reitera el llamado al Reino Unido a no realizar acciones militares en la región y a retomar las negociaciones diplomáticas por la soberanía en las islas en las condiciones que establece la resolución 2065 de la ONU», indicó Filmus.
A través de un comunicado, la Cancillería enfatizó que Argentina «rechaza en los términos más contundentes la realización de estas maniobras navales, aéreas y militares en territorio argentino ilegítimamente ocupado por el Reino Unido».
Esos ejercicios «constituyen una injustificada demostración de fuerza y un deliberado apartamiento de los llamamientos de las numerosas resoluciones de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales, que instan tanto a la Argentina como al Reino Unido a reanudar las negociaciones a fin de encontrar una solución pacífica y definitiva a la disputa de soberanía que involucra a ambos países».
En ese sentido, el Gobierno reafirmó que «seguirá manteniendo su rechazo a la presencia militar británica en el Atlántico Sur, bregando por el apoyo internacional, que ya se ha manifestado en numerosos esquemas regionales, bajo la premisa de que esa presencia es contraria a la política de la región de apego a la búsqueda de una solución pacífica para la disputa de soberanía».
«La persistencia del Reino Unido en la realización de ejercicios militares en el Atlántico Sur contraviene específicamente la resolución 31/49 de la Asamblea General de Naciones Unidas, que insta a ambas partes (la Argentina y el Reino Unido) a que se abstengan de adoptar decisiones unilaterales que entrañen la introducción de modificaciones en la situación mientras las Islas Malvinas están atravesando por el proceso de negociación recomendado por la ONU», añadió Cancillería.
La presencia militar contradice también la resolución 41/11 de la Asamblea General (Zona de Paz y Cooperación en el Atlántico Sur) que, entre otras disposiciones, exhorta a los estados de todas las demás regiones a que «respeten escrupulosamente la región del Atlántico Sur como zona de paz y cooperación, en particular mediante la reducción y eventual eliminación de su presencia militar».