Bolivia| Tras el arribo de 20.000 dosis de Sputnik V arranca la vacunación

Bolivia cuenta desde este jueves con un lote de 20.000 vacunas rusas Sputnik V, tras llegar a La Paz el avión que trasladó la carga desde Buenos Aires, y el cronograma de inmunización prevé la distribución inmediata de las dosis y el comienzo este viernes de la aplicación, en principio con el personal médico de Santa Cruz de la Sierra, una de las ciudades con cifras más altas de contagiados.

Poco después de las 17 (las 16 en la Argentina) llegó al aeropuerto de El Alto, vecina a La Paz, el avión 737-800 NG con CP-3151 de Boliviana de Aviación (BOA), que fue recibido por el presidente Luis Arce.

La aeronave transportó desde Buenos Aires las primeras dosis con las que se iniciará el plan de vacunación masiva y gratuita del Ejecutivo boliviano, y que habían llegado a la capital argentina también este jueves mismo desde Moscú, en un vuelo especial de Aerolíneas Argentinas.

Bolivia se convirtió así en el segundo país de la región en recibir la Sputnik V por las gestiones de Arce y las buenas relaciones que el oficialismo tiene con Rusia, y la llegada se dio, según la estatal agencia ABI, “en un ambiente de júbilo y esperanza expresado por las organizaciones sociales también presentes en el aeropuerto” de El Alto.

Las vacunas empezaron a ser trasladadas en caravana hasta la sede del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) para que puedan ser distribuidas en todo el territorio nacional.

«Absolutamente es un día histórico, en cumplimiento de nuestro plan», resaltó Arce, para quien la vacunación será una «solución estructural» para que «en esta gestión 2021 sea despedido el coronavirus».

¡Llegaron las vacunas #SputnikV a #Bolivia! #VamosASalirAdelante.
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— Luis Arce Catacora (Lucho Arce) (@LuchoXBolivia) January 28, 2021

El presidente ratificó que mañana mismo empezará la vacunación «en los nueve departamentos, gradualmente, por supuesto, en la medida en que vayan llegando las vacunas a los lugares que tengan y garanticen la cadena de frío».

El vocero gubernamental, Jorge Richter, confirmó que las primeras aplicaciones se harán en Santa Cruz, capital del departamento homónimo que concentra más de un tercio de los 208.000 casos de todo el país, informó la agencia Sputnik.

Ayer, Arce había destacado que el cargamento contenía un número tres veces mayor de dosis en relación a lo previsto inicialmente.

“Las primeras vacunas ya están en camino a Bolivia. Tenemos la buena noticia de recibir una cantidad mayor de la que se había anunciado; son 20 mil dosis que se aplicarán inicialmente a nuestro personal de salud que está en primera línea. #VamosASalirAdelante”, escribió el mandatario en su cuenta en Twitter.

El 30 de diciembre pasado el Gobierno boliviano firmó el contrato con Rusia para la compra de 5,2 millones de dosis de Sputnik V, que busca suministrar gratis y de forma voluntaria a la población.

Las autoridades sanitarias aspiran a inmunizar a la totalidad de la población, con más de 15 millones de dosis, entre Sputnik V, AstraZeneca-Oxford y las suministradas a través del mecanismo Covax, de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

«Lamentablemente todo el mundo quiere vacunas; nos estamos peleando los países, y esto ha generado también algunos problema con las productores, pero confiamos en que se cumplirán los contratos», dijo hoy Arce mientras se descargaban los lotes.

Bolivia enfrenta una situación compleja en número de contagios y muertos, con cuadros especialmente graves en La Paz y Santa Cruz. El país ya superó los 200.000 contagiados y los 10.000 muertos por Covid-19, y esta semana se endurecieron algunas restricciones.

Durante la primera ola de la pandemia, el pico de crecimiento fue registrado en julio de 2020, cuando se superó en dos ocasiones la marca de 2.000 casos diarios y la cifra de muertos se aproximaba a los dos millares, pero esta segunda ola llega con un número de casos que supera a los de 2020.

Desde principios de año los casos positivos se incrementaron en casi 30 por ciento, aunque las muertes no aumentaron en la misma proporción, lo que, si bien muestra una baja en la tasa de letalidad, todavía es alta en comparación con países de la región.