El 59% de los japoneses quiere la cancelación de los Juegos Olímpicos
Un nuevo sondeo de opinión realizado en Japón reflejó que el 59 por ciento de los ciudadanos de ese país quiere que los Juegos Olímpicos Tokio 2020 se cancelen definitivamente por el riesgo sanitario que implica su organización.
La muestra tomada entre el 7 y 9 de mayor por el periódico Yomiuri Shimbun revela que sólo el 39 por ciento está de acuerdo con su celebración a partir del 23 de julio próximo.
Paralelamente, otra encuesta realizada el fin de semana por TBS News demostró que la oposición a Tokio 2020 alcanza un 65% en momentos que una petición virtual ya registró 300.000 firmas en cinco días para pedir la suspensión de la cita olímpica.
Japón prorrogó el estado de emergencia en Tokio y otras tres zonas hasta finales de mayo y lucha por contener un aumento de los casos de Covid-19, lo que plantea «más dudas» sobre si los Juegos deben seguir adelante.
Los funcionarios olímpicos internacionales, los planificadores de Tokio y el primer ministro Yoshihide Suga insistieron en que los Juegos se celebrarán de forma «segura» y sin la presencia de espectadores extranjeros y, además, dieron a conocer medidas de estricto control sanitario para prevenir las infecciones por coronavirus.
Sin embargo, estas medidas no lograron aliviar la preocupación del público por los Juegos, que se pospusieron el año pasado mientras el coronavirus se extendía por todo el mundo.
El primer ministro Suga reiteró que el Comité Olímpico Internacional (COI) tendrá «la última palabra» sobre los Juegos y dijo que el papel del Gobierno nipón era «tomar medidas» para que pudieran celebrarse las competencias con «seguridad», apunta el diario Mundo Deportivo.
Un funcionario de la prefectura de Okayama dijo que estaban considerando mantener el relevo de la antorcha olímpica fuera de las vías públicas cuando pase por allí la próxima semana.
Este domingo, la tenista japonesa Naomi Osaka dijo que, aunque había esperado toda su vida para participar en los Juegos Olímpicos, el riesgo de celebrar los Juegos de Tokio debía ser discutido «cuidadosamente».