Los «Libertarios» pueden llegar al Congreso de la mano de Mieli y Espert
El partido de Avanza Libertad, compuesto por Javier Milei, precandidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires y José Luis Espert, precandidato a diputado nacional por la Provincia de Buenos Aires, obtuvo el 13,66% en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, según los primeros resultados oficiales y el 81,27% de las mesas escrutadas, y se posiciona como la tercera fuerza.
«Ahora es el momento en que los individuos tienen que decidir cambiar este rumbo decadente. Desde mi punto de vista, la única expresión liberal pura y consistente es la que expresamos nosotros. La verdad es que nosotros somos la mejor expresión del liberalismo», dijo Milei cuando emitió su voto este domingo 12 de septiembre.
Espert, por su parte, denunció la falta de boletas en La Matanza, 3 de Febrero, Merlo y Vicente López y aseguró que concurrirá a la justicia por esa razón.
En reiteradas ocasiones, Milei dijo que no subirá bajo ningún punto los impuestos ni legislará en contra de la libertad y del derecho de la propiedad privada.
Oportunamente, confirmó que, de llegar al Congreso, su primera propuesta será una ley de reforma de la administración financiera del sector público que le permita «renunciar a su dieta» como legislador, algo que hoy no se permite ya que, aunque el salario de los diputados y senadores puede ser donado, no puede no cobrarse.
Por otro lado, insistió con «volar por los aires» el Banco Central y argumentó las razones: «Cuando el BCRA determina la cantidad de dinero lo único que hace es determinar el nivel de precios, entonces si se expande hace daño y si se achica hace daño y así ¿para qué lo quiero?».
En esta línea, indicó que su plan para eliminar el BCRA comenzaría con una reforma financiera para establecer una Banca Simon, un sistema bancario «anti corrida financiera» que separa las actividades de captación de depósitos y pagos de las actividades de intermediación financiera.
Luego, permitiría la libre competencia entre bancos para que, en caso de que estos se equivoquen, paguen ellos mismos los costos y «no la sociedad».
Y, finalmente, abriría una competencia de moneda: «Creo que los argentinos ya elegimos nuestra moneda, es el dólar, en ese momento el Banco Central puede redimir toda su deuda contra sus activos y lo podes eliminar», concluyó con su ambicioso plan.
Por su parte, Espert compartió los proyectos y propuestas que impulsará como diputado.
En primer lugar, el precandidato se refirió a la necesidad de recortar el gasto público para poder disminuir los impuestos, punto en el que disparó contra la clase política tradicional y la oposición: «Es la nueva demagogia de todos estos caraduras que ahora hablan de bajar impuestos y cuando tuvieron la oportunidad de gobernar los subieron».
Según el economista, el único camino para bajar el gasto público y eliminar el déficit fiscal, -presente en la Argentina desde hace 60 años, como indica Espert- dejando un margen para lograr una disminución de impuestos, es «repensar el Estado argentino en los tres niveles de gobierno: Nación, provincias y municipios».
No obstante, Espert no quiere eliminar los planes sociales -los cuales considera que deben transformarse en trabajo genuino- ni aplicar una baja a las jubilaciones, sino que considera necesario discutir «todo el gasto de la súper estructura estatal».
En segundo lugar, buscará flexibilizar las leyes de trabajo ya que, según él, son las culpables de que alrededor de 6 millones de personas en la Argentina trabajen en negro.
Además, apuntó contra los dirigentes sindicales y advirtió que «si los sindicatos se oponen cortando calles, irán presos». «Pero no porque no aceptan mi ley laboral sino porque cortan la calle», aclaró.
En tercer lugar, Espert sostuvo que hay que recuperar la doble escolaridad en las escuelas públicas y privadas y, a su vez, quiere reformar los contenidos que se estudian desde los primeros años.
«Hay que cambiar los contenidos totalmente, la Argentina no tiene futuro si se enseña lo que se está enseñando ahora desde primaria», consideró.
En último lugar, el economista señaló que el dinero emitido por el Banco Central ya no tiene función y confesó que «está preocupado por los problemas reales que terminan causando inflación y dolarización».
«Hay que ir para atrás. Si no terminas financiando con déficit y siempre el déficit a la larga termina siendo inflacionario», propuso.