Clausuran un centro médico que emitía certificados falsos de Covid en el barrio porteño de Liniers
Un centro médico que funcionaba en el barrio porteño de Liniers pese a tener una clausura vigente y emitía certificados falsos de Covid-19 fue cerrado tras un allanamiento de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, al tiempo que se imputó a los responsables por los delitos de «falsificación de documentos» y «violación de clausura», informó hoy el Ministerio Público Fiscal (MPF).
En la inspección también se encontraron residuos patogénicos sin tratamiento ni disposición adecuados y certificados impresos con sellos de médicos de diferentes especialidades listos para ser completados.
El allanamiento solicitado por el fiscal fue autorizado por el Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas Número 3, a cargo de Carla Cavaliere.
Los oficiales secuestraron tres computadoras, dos teléfonos celulares, grabaciones del lugar y documentación, entre ella certificados de PCR apócrifos, que según comprobaron se extendían con el sello de un laboratorio ajeno.
Del operativo en el centro médico ubicado en Ramón Falcón al 6.900 participaron oficiales de la División Delitos Contra la Salud de la Policía de la Ciudad junto con el Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) del MPF.
Asimismo, a pedido de la Unidad Fiscal en Materia Ambiental (Ufema), concurrió personal del Ministerio de Salud de la Nación, la Agencia Gubernamental de Control (AGC), la Dirección General de Control Ambiental (Dgconta), la Dirección General de Limpieza (Dglim) y el Departamento de Investigaciones de Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina (PFA).
La denuncia fue radicada el 17 de noviembre de 2021 por un profesional de la salud, que daba cuenta que en el centro médico se emitían certificados falsos, utilizando su firma digitalizada y la razón social de la empresa a la que pertenece, simulando ser una sucursal.
En febrero el centro médico había sido clausurado por poseer su habilitación en trámite, tras ser denunciado por un vecino que indicó que en el lugar se arrojaban a la vereda residuos patogénicos sin protección.
Sin embargo, el establecimiento continuaba funcionando y durante el allanamiento había pacientes aguardando ser atendidos.
El Ministerio de Salud de Nación dispuso una nueva clausura y la AGC, Dgconta y Dglim realizaron actas por faltas administrativas y de seguridad e higiene.
Los agentes notificaron a una mujer que se encontraba a cargo en el lugar una imputación por «infracción al artículo 292 del Código Penal sobre falsificación de documentos» y labraron un acta por «infracción al artículo 82 sobre violación de clausura», informó el MPF.
La fiscalía también amplió la imputación al haberse secuestrado documentación vinculada con prácticas médicas no autorizada y ordenó el secuestro de los certificados pre impresos y sellos médicos a fin de establecer posibles damnificados.