«Para las personas con discapacidad, el deporte adaptado implica autonomía»
Yohana Aguilar, figura, goleadora y reciente campeona mundial con las Murciélagas en Birmingham, Inglaterra, valoró hoy el histórico logro de la selección argentina femenina de fútbol 5 adaptado y agradeció el apoyo institucional recibido para alcanzarlo.
En entrevista para Télam, la goleadora, de 24 años, expresó su emoción por el resultado obtenido: «Recién ahora estamos cayendo en cuenta de lo que significó este mundial para nosotras y para la gente. El fútbol para ciegos ha crecido muchísimo en Argentina, tenemos potencial y mucho apoyo, algo que no pasa en todos los países».
El recorrido en el torneo organizado por la Federación Internacional de Deportes para Ciegos (IBSA), fue contundente: goleadas Alemania (3-0) e India (4-0) y un empate sin goles frente a Austria para liderar el Grupo B. En semifinales, otra firme victoria frente al seleccionado sueco, por 3 a 0.
Las Murciélagas recibieron su primer gol en contra en la final, cuando se fueron al entretiempo perdiendo 1 a 0 contra Japón.
«Teníamos un sabor amargo, veníamos de un primer tiempo donde lo dimos todo, con el cuerpo al límite», recordó Yohana. «Se me cruzó todo por la cabeza en milésimas de segundo, la gente que aportó su granito de arena para que estemos, la familia que nos apoya. Teníamos que salir a jugar como la final que era», se planteó.
En el mismo sentido, recordó las palabras del entrenador, Gonzalo Abbas, ex arquero de fútbol 5 adaptado y doble medallista paralímpico: «Nos dijo que lo daríamos vuelta, él es muy positivo con esas cosas y te contagia».
Yohana, con la ’10’ en la espalda, se puso el equipo al hombro y alcanzó la igualdad a través de una jugada donde eludió a todas sus rivales, y definió de zurda ante el achique de la arquera japonesa. Faltando poco más de un minuto para el cierre, convirtió el gol del título mediante un penal que ella misma fabricó.
«La semifinal y la final fueron los partidos donde más tranquila estuve. El último partido terminamos jugando con el corazón en la mano, con fútbol en la sangre, para mí las Murciélagas jugaron su mejor encuentro en la final del mundo». Aguilar fue la máxima artillera de la competencia, con siete goles.
Pero su relación con el deporte no comenzó con las Murciélagas. Yohana practicó danza clásica desde los tres hasta los seis años, y después se decidió por el patín artístico. «Terminé compitiendo con patinadoras videntes y, aunque se sabía que yo era ciega por la adaptación que llevaba, al momento de calificar lo hacían en las mismas condiciones», comentó.
Además, integró la selección argentina juvenil de atletismo durante tres años, representando al país en los Juegos Parapanamericanos de Toronto 2015. «En esos años clasifiqué entrenando mucho y sacrificando cosas, pero siempre con un objetivo claro. Le prometí a mi mamá, Magdalena, que luego retomaría mis estudios secundarios. La familia tiene mucho que ver, ella siempre me ayudó a buscar una persona que se anime a darme clases y nunca tuve un ‘no’ de su parte».
Poco después, llegó el fútbol. Yohana es oriunda del barrio Argüello, en la ciudad de Córdoba, pionera en la formación del equipo femenino para ciegas. Allí se estaba gestando, desde 2012, el grupo de las Guerreras, donde se forjó la base de la selección campeona en Inglaterra. Yohana se acercó impulsada por la curiosidad del deporte que practicaban sus hermanos mayores.
«Siempre jugué al fútbol con varones que veían, tanto en el colegio como con mis hermanos. No había pelota con sonido, pero le ponían una bolsa para lograr la adaptación y todo eso fue en el barrio», rememoró. A finales de 2016, las Guerreras comenzaron a ampliarse y a conseguir apoyos, después de golpear muchas puertas.
Entre 2017 y 2020, Yohana viajó tres veces a Japón: dos con el equipo cordobés y una formando parte de un combinado internacional para enfrentar a la selección local. «Los viajes tuvieron que ver con la victoria en la final, porque una trae experiencias, se las cuenta a las compañeras y analiza el sistema de juego que tienen, que es muy similar al nuestro», relacionó.
La futbolista subrayó la importancia del soporte institucional en el crecimiento de la disciplina: «En Argentina el fútbol para ciegos está recibiendo mucho apoyo, la Secretaría de Deportes de la Nación y la Federación Argentina de Deportes para Ciegos (FADeC) nos dieron una mano grandísima».
«Confío en nuestra profesionalización, no somos simplemente chicas que quieren jugar al fútbol, nosotras nos dedicamos a esto y entenderlo nos hace seguir creciendo», agregó.
Hoy Yohana se convirtió en una inspiración para nuevas generaciones. Con convicción, fortaleza y perseverancia, la campeona del mundo convocó a seguir ampliando la disciplina: «Se necesita que cada vez más chicas y chicos conozcan que hay deporte adaptado, en este caso hablamos de fútbol, pero hay muchas disciplinas para distintos tipos de discapacidades», asegura, y concluye: «Para la persona con discapacidad también implica autonomía, te da muchas cosas más que vienen de la mano del deporte.»
-¿Cuál es tu inspiración para dedicarte al fútbol?
«Una tiene como referente al equipo de los Murciélagos, con un camino ya hecho al que le siguen sumando estrellas. Nosotras como Murciélagas soñamos con los mismos logros, jugamos nuestro primer mundial y pudimos traer la de oro, ahora hay que mantenerse a base de esfuerzo, entrenamiento y perseverancia. Aunque sea el mismo nombre y el mismo deporte, abrimos nuestro propio camino».
Este año, la selección nacional se consagró campeona del mundo en fútbol para ciegos, tanto en la división femenina como en la masculina, con la obtención del tercer título por parte de los Murciélagos.